El Decano cerró su participación en el torneo Clausura con una derrota como visitante frente a Guaraní Antonio Franco por 4 a 1. Así terminó último en la Zona D y ahora más que nunca deberá poner la cabeza en la etapa final.
Estaba claro que el partido frente a Chaco For Ever de la fecha pasada era una bisagra y así fue. Es que después de todo lo sucedido se optó por afrontar el último compromiso de la fase regular de la segunda parte de la temporada con un equipo alternativo, que tampoco encontró los resultados buscados por los habituales titulares desde el pasado 7 de marzo cuando justamente se sumó de a tres por última vez frente a Guaraní Antonio Franco.
Este volvió a ser el equipo que ayer tuvo enfrente Patria, pero la suerte no fue muy distinta a la de sus últimas presentaciones más allá de los cambios de nombres, por lo que cerró su paso por el torneo Clausura sin haber podido ganar en sus últimos siete compromisos, de los cuales empató los cuatro primeros y perdió en los restantes.
Pero lejos de todo eso, el dolor se hace más intenso por no haber aprovechado las ocasiones que hubo para trepar en la tabla de posiciones en una competencia donde la paridad fue moneda corriente. Y si se tienen en cuenta los últimos resultados, entonces puede que la bronca sea mayor porque con dos triunfos más el equipo hoy estaría entre los clasificados y saltearía una ronda de playoffs que es lo que ahora afrontarán los clasificados entre el miércoles y el fin de semana que viene.
Claro que para entender todo eso hay que volver a la realidad. Esa que marca que haciendo a un lado todas las posibilidades que se pudo haber tenido, el rendimiento del equipo decayó demasiado al punto de tener primero que superarse a sí mismo.
Esto quedó en claro ayer cuando Sebastián Godoy puso en ventaja a Guaraní a los 44 minutos del primer tiempo al empujar un buscapié que pasó por el área del Decano, que como su rival terminó con uno menos por expulsión de Angel Ibarra y de Leandro Fernández.
Tras el descanso Cristian Cravero le dio un bonus a Patria cuando tras recibir de Claudio Santa Cruz se mandó con todo al ataque y empató a los 11 minutos, pero todo volvió a caer en la misma cuando a los 17 Lucas López García volvió a poner al frente a los misioneros, para que sea este mismo jugador y Néstor Núñez quienes sellaron la historia a los 46 y 47 minutos y entonces ya no hubo más nada por hacer.
Estaba claro que el partido frente a Chaco For Ever de la fecha pasada era una bisagra y así fue. Es que después de todo lo sucedido se optó por afrontar el último compromiso de la fase regular de la segunda parte de la temporada con un equipo alternativo, que tampoco encontró los resultados buscados por los habituales titulares desde el pasado 7 de marzo cuando justamente se sumó de a tres por última vez frente a Guaraní Antonio Franco.
Este volvió a ser el equipo que ayer tuvo enfrente Patria, pero la suerte no fue muy distinta a la de sus últimas presentaciones más allá de los cambios de nombres, por lo que cerró su paso por el torneo Clausura sin haber podido ganar en sus últimos siete compromisos, de los cuales empató los cuatro primeros y perdió en los restantes.
Pero lejos de todo eso, el dolor se hace más intenso por no haber aprovechado las ocasiones que hubo para trepar en la tabla de posiciones en una competencia donde la paridad fue moneda corriente. Y si se tienen en cuenta los últimos resultados, entonces puede que la bronca sea mayor porque con dos triunfos más el equipo hoy estaría entre los clasificados y saltearía una ronda de playoffs que es lo que ahora afrontarán los clasificados entre el miércoles y el fin de semana que viene.
Claro que para entender todo eso hay que volver a la realidad. Esa que marca que haciendo a un lado todas las posibilidades que se pudo haber tenido, el rendimiento del equipo decayó demasiado al punto de tener primero que superarse a sí mismo.
Esto quedó en claro ayer cuando Sebastián Godoy puso en ventaja a Guaraní a los 44 minutos del primer tiempo al empujar un buscapié que pasó por el área del Decano, que como su rival terminó con uno menos por expulsión de Angel Ibarra y de Leandro Fernández.
Tras el descanso Cristian Cravero le dio un bonus a Patria cuando tras recibir de Claudio Santa Cruz se mandó con todo al ataque y empató a los 11 minutos, pero todo volvió a caer en la misma cuando a los 17 Lucas López García volvió a poner al frente a los misioneros, para que sea este mismo jugador y Néstor Núñez quienes sellaron la historia a los 46 y 47 minutos y entonces ya no hubo más nada por hacer.
nota:diario la mañana